En medio de la cuarentena obligatoria, un violento e insólito cortejo fúnebre, con disparos al aire, tuvo lugar este miércoles en la zona norte de Rosario.
Durante el Sepelio de Hernán Ignacio G., un joven de 20 años que se suicidó este miércoles por la mañana, se realizó frente a la comisaría décima (Darregueira 1139). Respetando el protocolo de prevención del coronavirus, el ritual se desarrolló sólo con familiares directos y con una breve duración.
Sin embargo, los amigos del fallecido se llevaron el cortejo al barrio y en la zona de Gallardo y Calvo, cerca del puente de Sorrento, desataron un ritual de tiros al cielo a modo de homenaje, mientras gritaban “Tiki”, apodo del suicida.
La inédita ceremonia fue registrada por uno de los participantes y el material fue difundido en las redes sociales.
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